La madre es la síntesis de la infancia, con sus verdades y laberintos, pero también puede ser la evidencia más nítida del dolor y del sufrimiento. Marisa Martínez Pérsico ha logrado una vertiginosa y conmovedora narración donde confluyen diferentes voces y registros, que trazan una cartografía de los recuerdos cuyo inventario define el carácter de cada protagonista”. —Federico Díaz-Granados