En esta impactante novela, la protagonista es sometida por sus circunstancias a ser mujer, madre, extranjera y esposa, pese a todo deseo. Matate, amor es un soliloquio sobre el trance de la maternidad en slow motion que deja a su paso un racimo marchito de imágenes sofocantes a pesar de estar en campo abierto, lejos de la bruma urbana. Ariana Harwicz, con una incuestionable maestría, coloca al lector frente a la indeterminación de los afectos y vínculos hacia lo más cercano: la familia. Su pluma expone un espectro de emociones contradictorias donde se desmiente la bondad o la crueldad en los recurrentes actos de una esposa, una madre, una mujer.