Vidas callejeras: pasos sin rumbo es el testimonio que nos entrega una investigadora desde el lugar donde tratan de sobrevivir los marginados menores de edad. En este libro usted será testigo de una aguda reflexión sobre esos niños cuya presencia cotidiana parece volverlos parte de nuestra normalidad. Un país que no cuida a sus niños es un país que lleva todas las de perder. Cuando los niños de la calle de México sientan que ya no tienen que huir, que la sociedad los acepta y les da amor, entonces ningún niño llamado Julio tendrá razón alguna para soñar que vuela y se va, ningún niño preferirá convertirse en animal a ser gente. (..) Ojalá y hubiera más Antolinas Ortiz en esta ciudad desalmada, donde cada quien se salva o se condena solo. Un libro como Vidas callejeras: pasos sin rumbo es una llamada de atención y una toma de conciencia.