«Debería comenzar diciendo que este libro, en realidad, es más que un libro, que a lo mejor es un bosque de palabras y sentidos. O de huecos y sinsentidos, como tal vez diría Nuria Ruiz de Viñaspre para no dejar títere con cabeza o cabeza sin títere que la pasee. Aunque a lo mejor no tenemos ya cabeza y somos en este mundo sólo cuerpos descabezados de títeres que se balancean en una barraca de feria. Lo que sí puedo resaltar es que este libro no se nos cae de las manos, que no se parece a ninguno, aunque está plagado de referencias literarias o filosóficas que multiplican sus significaciones. Un libro con sentido y consentido, porque su autora ha sabido dejarlo ir por donde ha querido cuando ha visto que la llevaba al misterio que es la literatura y la vida.» (Ángeles Mora)