Este es un libro que invita a las y los docentes a explorar formas de abordar el ejercicio de la escritura escolar desde una metodología basada en problemas. El libro recoge experiencias de ocho profesoras que se aventuraron con esta metodología y desafiaron a sus estudiantes a perder el miedo a escribir. La resolución de problemas de escritura pone en el centro de su aprendizaje al estudiante, desarrolla su autonomía, empatía y capacidad crítica; a su vez, permitiría movilizar ciertas concepciones tradicionales respecto a la enseñanza de la lengua y su desarrollo en el aula. La escritura debe vivirse sin miedo, porque pareciera que se aprende mejor cuando es con dignidad, en libertad y cuando es con otros.