Rumi nació en el siglo xiii en el actual Afganistán en un contexto de fundamentalismos religiosos como las cruzadas, además del expansionismo militar del Imperio mongol. Para sobrevivir, el padre de Rumi condujo a su familia por Bagdad, Damasco y Konia, en donde terminaron radicando. En ellas Rumi fue testigo de cómo las personas se desacreditaban, ofendían y atacaban. De ahí, que a lo largo de su vida se fuera gestando y puliendo una propuesta para frenar el encono y la violencia. Fue así como forjó su noción de Tawhid (Unicidad) con la que designaba la aspiración de toda alma por retornar a su origen, es decir, fundirse con Dios. El encantador de almas reconstruye a través del análisis de una treintena de fuentes primarias, es decir, de documentos medievales el contexto en que vivió Rumi y revisa detenidamente la amplia obra literaria del poeta místico a la luz de decenas de estudios contemporáneos de diversas partes del mundo, con el objetivo de develar una de las más tempranas propuestas de ecumenismo para bien del género humano.